SCREAM
Aquella noche se oían más ruidos de lo normal,
pero claro, la tormenta era muy fuerte. Estaba en la cama y vi una luz que
pasaba por debajo de mi puerta. Cogí mi linterna y decidí ir al salón a
mirar.
Por el
pasillo pude notar una respiración cerca de mí. Estaba nervioso y empecé a
sudar.
De
repente, vi una nota, escrita con sangre, que decía ¡AYUDA POR FAVOR! Alumbré
alrededor de mí y vi algo que nadie querría ver en su vida....llamado ¡¡¡¡¡¡¡¡¡SCREAM!!!!!!!!!!
Salí corriendo, miré
para atrás y no estaba. Y, al mirar hacia adelante, me encontré con su horrible
cara.
Me tapé los ojos y
grité muy fuerte. Cuando abrí los ojos de nuevo vi que estaba en mi cama; mi
madre se acercó y me dijo:
- Buenos días, ¡Feliz día de Halloween!.
Mi
cuerpo aún sudaba, pero me alegré porque todo había sido un sueño.
FIN
HALLOWEEN
LLEGA
Había una
vez una niña que se llamaba Alba. Ese día ella sabía que llegaba Halloween,
así que se puso muy contenta y se disfrazó de esqueleto y su perro de vampiro;
sí, como habéis oído, tenía un perro. Era su mejor amigo y hermano. A veces, se
enfadaba, pero eran best friend forever.
Un día, de
repente, sonó un trueno y relámpagos, pero ellos no tenían ni un poquito de
miedo y se quedaron jugando. Alba tenía que sacar a su perro y entonces
salieron, y de repente,se le apareció un vampiro y les dijo…¡¡quiero ser vuestro
amigo¡¡. Y ellos aceptaron y siguieron y se encontraron con un fantasma niña.
Entonces
les dijo; ¡¡quiero ser vuestra amiga¡¡. Aceptaron y luego se encontraron con
una calabaza y se hicieron amigos de ella y volvieron a casa con un montón de
amigos.
FIN
Yo era una niña que venía de la familia más rara
del mundo. Se burlaban de mí porque vivía en el cementerio.
Un día en
el cementerio, cuando le estaba echando flores a la tumba de mi hermana,
oí un ruido, era de noche y vi una
sombra, me escondí y llamé a mi madre, no estaba, llamé a mi padre y no estaba.
No quedaba nadie más y la sombra se acercaba. Descubrí que era un fantasma e
intenté salir corriendo, pero el fantasma me mató y por algo muy raro ¡SIGO VIVA! Ya no puedo
acercarme a los fantasmas por miedo de que me maten otra vez.
Desde ese momento,
tengo muchas ganas de matar a los niños del colegio Virgen del Loreto,
sobre todo a los de 3ºA.
¡El día de Halloween será el momento! JI JI
JIIIIIII
LA CASA ENCANTADA
Era una noche
de Halloween. Cloe y sus amigos quedaron para ir de casa en casa, a pedir truco
o trato. Fueron caminando hasta encontrarse con la casa encantada. Cloe propuso
entrar pero la mayoría no quería porque decía que daba mucho miedo.
Así que, los más atrevidos decidieron
entrar, y los demás se quedaron fuera
para ver lo que pasaba. Al rato salieron gritando y diciendo que allí había una
vieja vestida de negro que les había dicho que se fueran de allí, porque si no
morirían.
Desde aquel día Cloe y sus amigos no volvieron
a pasar por allí.
ATRAPADOS EN LA CASA DE GRANNY
En la noche del 31 de octubre, el grupo OOF (Hugo, Marina y yo) fuimos a una fiesta de Halloween en la plaza del barrio. Allí encontramos un portal muy oscuro que parecía mágico y entramos dentro por curiosidad. Pero cuando quisimos salir, no pudimos. Descubrimos que debía ser la casa de algún asesino porque tenía muchas trampas, estaba llena de sangre y era muy oscura.
Luego empezamos a buscar la llave de la puerta, pero no la encontramos. De repente, vimos a alguien saliendo de una habitación y descubrimos que era… ¡Granny!, una anciana terrorífica que aparece en un juego de miedo.
Corrimos a una habitación secreta y allí encontramos un martillo. Entonces fuimos a la puerta principal y rompimos la tabla que había en la puerta, pero aún teníamos que abrir la cerradura. Y cuando estábamos buscando la llave… ¡nos encontró Granny! ¡Qué miedo! Ella nos perseguía y casi nos estaba alcanzando cuando rápidamente nos metimos en su dormitorio debajo de su cama.
En ese momento oímos una voz decir: ¡I see you! ¡I see you! Nosotros estábamos muy asustados.
De repente apareció alguien… ¿¡Joaquín!? Éste, al ver a Granny, empezó a correr como un descosido y nosotros aprovechamos para salir de debajo de la cama, y justo cuando Granny iba a atrapar a Joaquín, le dimos un martillazo y cayó al suelo y se desmayó.
Tuvimos suficiente tiempo para buscar la llave de la puerta que estaba escondida en el bolsillo del camisón de Granny. Abrimos entonces la puerta, pero… nos faltaba la contraseña para que se abriera entera.
Fuimos al despacho de Granny y encontramos un ordenador y al encenderlo vimos que tenía un número que era 6778776. ¡Esa era la contraseña!
Rápidamente nos fuimos a la puerta, pero… ¡allí estaba Granny! Yo me fui al piso de arriba y con el martillo machaqué el suelo que le cayó a Granny encima. Así es como logramos escapar de aquel portal de pesadilla.
Todavía, cuando estoy intentando dormirme, oigo una voz que dice I see you, I see you. Si tú también la oyes, ¡ten cuidado!, Granny está cerca.
UNA NOCHE DE TERROR
Al día siguiente era Halloween y estábamos preparando todo para la fiesta en nuestro residencial. Mamá había ido a la tienda a comprar chuches para dárselas a los vecinos que vinieran a casa. También adornamos la puerta con cosas de Halloween. Al final se hizo bastante tarde y nos fuimos a la cama a dormir.
Cuando me desperté, a la mañana siguiente: -¡Por fin es Halloween! –dije. Estaba deseando que llegara la noche para poder ir a la fiesta. Cuando por fin oscureció, salimos al patio mi hermano, mi vecina y yo, pero no había nadie y la luna estaba roja. Mi vecina dijo que sería mejor irnos a casa, pero yo insistí en quedarnos y disfrutar de la noche, así que nos fuimos a jugar.
Pero de repente oímos un llanto, no sabíamos lo que era. Miramos hacia atrás y vimos a una criatura rara con una boca muy grande, con los dientes afilados y con un cuchillo lleno de sangre. Le preguntamos: -¿De qué vas disfrazada tú?
¿Quién eres? En vez de contestar empezó a reírse fuerte: -Ja, ja, ja, ja. .
En ese momento fue a por nosotros y asustados empezamos a huir. Gritamos: -¡Ayuda, ayuda!, pero nadie nos oía.
Intentamos escondernos, pero esa criatura rara nos encontró, nos ató con una cuerda y nos llevó a su cueva. Tenía un pozo grandísimo con zanahorias y lechugas. Nos metió en una jaula.
Al primero que cogió fue a mi hermano. Yo me tapé los ojos y me escondí detrás de mi vecina. Lo cortó en tres trozos grandes y lo echó al pozo. Luego cogió a mi vecina, le arrancó los sesos y se los comió. Empachada se quedó durmiendo. Yo estaba aterrorizada y temblando.
Encontré entonces unos alicates en el suelo y los alcancé. Con ellos rompí el candado y salí corriendo a la calle. Allí pedí ayuda a un coche que pasaba y fuimos a la Policía. Les guié hasta la cueva y consiguieron atrapar a la criatura rara y meterla en la cárcel.
Unos años después salió la noticia de que la criatura se había escapado de la cárcel. Todavía la están buscando. Suele salir en la noche de Halloween, así que tengan cuidado no se vayan a encontrar con ella.
LOS HERMANOS HUESOS
Érase una vez un esqueleto llamado Jonnhy
Huesos. Tenía un hermano que se llamaba Rompe Huesos. Jonnhy y su hermano
dormían durante el día y salían durante la noche.
A los hermanos Huesos les gustaba jugar al
fútbol pero, como no podían porque eran esqueletos, se dedicaban a esconderse
detrás de los árboles y observaban a los niños durante mucho tiempo. Mientras
Jonnhy Huesos los distraía, Rompe Huesos mataba a algunos niños; luego, cuando los mataba, se iban corriendo escondiéndose
entre los árboles.
Un día Rompe Huesos en vez de matarlos,
les cogió la pelota y, al rato, la dejó
en el mismo sitio donde estaban jugando.
Cuando los niños volvían se encontraban las
pelotas llenas de sangre hasta que un día los niños tramaron un plan para
pillar a quien los mataba y les quitaban los balones. Todos los niños estaban
disimulando que jugaban menos uno que estaba con las madres para avisarlas.
Cuando vinieron Jonnhy Huesos y Rompe
Huesos, el niño avisó a las madres y ninguna lo creyó, menos una que cogió su
bolso y fue allí; entonces vio a Jonnhy
Huesos y Rompe Huesos y los persiguió hasta que se tropezaron con una piedra mientras
corrían. La madre cogió el bolso y no paró hasta romperle los huesos a los dos.
Desde entonces aprendieron a no matar a la gente y a no robarle los balones a
los niños y devolvérselos llenos de sangre.
EL TERROR JOAQUÍN MANOSTIJERAS
¡HOLA!
SOY MANOSTIJERAS Y TE VOY A CORTAR LA CABEZA, LAS MANOS O EL PELO…
¡JA,
JA!
LAS
TIJERAS OS MATARÁN…
EN
HALLOWEEN NOS VEREMOS Y CON MIS MANOSTIJERAS HARÁN TERROR A TODOS
¡JA, JA, JA!
SI
LA SANGRE TE ASUSTA…CON MIS MANOS DE TIJERAS LA SANGRE SALDRÁ Y EL MUNDO ENTERO
SE ATERRARÁ.
UN DIA ENTRÉ EN UN COLEGIO Y ARAÑABA LAS PAREDES, TODOS LOS
NIÑOS SALÍAN CORRIENDO.
SI
QUIERES JUGAR, VE AL RECREO PERO, NO TARDARÁS… ME IRÉ DEL COLEGIO SIN
DESPEDIRME PERO DIRÉ ADIÓS CUANDO MUERAS.
LA MANSIÓN ABANDONADA
Un día al atardecer, camino a nuestro pueblo, se nos paró el coche al lado de una mansión abandonada. De repente se escucharon tres palmadas y apareció una sombra detrás del coche.¡Nos dimos un gran susto!
Después decidimos ir con las linternas a investigar. Entramos para ver qué sucedía. Al abrir, lo encontramos todo oscuro. Apareció una mujer con los pelos de loca encima de una escalera llena de arañas. La estábamos enfocando con las luces y desapareció convirtiéndose en polvo. Salimos corriendo para escapar y ponernos a salvo.